NUESTROS JÓVENES CUENTA CUENTOS

La rana que no comía moscas

Érase una vez una rana que no comía moscas. La causa de ello, es que oía ruidos y tenía miedo, por la noche, por la mañana y por la tarde.

Un día fue al puente y se encontró con mucho animales: murciélagos, conejos, pájaros, leones, jirafas, osos panda, no se tiraban al agua porque tenían miendo. La rana con normalidad se tiró al río con una increíble pirueta. Todos decían lo valiente que era. La rana comprendió que su miedo era ridículo y desde entonces pudo volver a comer moscas.

Rebeca Portal

 

El gato celoso

Epi, era un gato muy celoso, que vivía con el perro Carmelo, pero no se llevaban bien porque Epi quería ser siempre el primero para todo, y cuando el amo, que quería a los dos por igual, acariciaba a Carmelo, Epi se sentía celoso y se enfadaba. Por ese motivo era pro el que se peleaban ya que Epi hacía enfadar a Carmelo.

Un día se estaban peleando y Epi al escapar, cayó en la piscina, Carmelo como buen amigo y buen compañero lo ayudó a salir y desde aquel día fueron grandes amigos.

David Lozano

 

El gato perdido

Érase una vez un gato que salió a pasear por el jardín de su casa, entonces se encontró con el señor lobo y el gatito se asustó. Tenía mucho, mucho miedo y salió corriendo del jardín, fue entonces cuando se perdió en el pueblo. Su madre lo buscó pero no lo encontraba. El gatito después de pasar hambre y frío, fue por casualidad al jardín de un vecino. El vecino que lo conocía se lo devolvió a su madre y desde entonces es muy feliz en la casa de su pueblo.

Mª Cristina Sánchez

-> (01-12-1998)